jueves, 24 de noviembre de 2011

Día de Acción de Gracias

Después de tanto tiempo sin escribir, estoy de vuelta. Y en esta ocasión es para reflexionar juntos sobre un tema que, cuando lo pienso, no debería de tener un día para festejarse, igual que el día de las madres, el día de los abuelos, el día del niño, o el de prevención contra el cáncer de mama; sin embargo la realidad es que, siguen existiendo madres que no son tomadas en cuenta, abuelos que son olvidados, niños maltratados o abusados y mujeres que no se autoexploran a las que finalmente, se encuentran llorando su diagnóstico tardío y en peligro de muerte.

Agradecer debería ser siempre una actividad normal, consciente y de todos los días; los padres deberíamos inculcar este hábito en nuestros pequeños. Y por ello, un día dedicado a dar gracias, sea del país que sea, independientemente del suceso que dio origen a esa celebración, realmente me parece que no está de más.

Pueden preguntarme o decirme que esa fiesta es una “gringada”, para qué festejarlo, no hay una fecha que pueda tener equivalente en México y que es pura mercadotecnia. Ok lo podemos considerar. Podría ser como la navidad, fecha en la que pocos conocen los significados, las reflexiones por hacer, y me atrevo a pensar, muy pocos siguen la tradición y los rituales previos, como lo es festejar y celebrar junto a la familia el adviento.

Ahora, también creo que nadie se ha tomado la molestia de proponerlo sinceramente y llevarlo a cabo, o bien sugerir que se festeje, por qué como siempre, el falso patrioterismo mexicano los hará blanco de calumnias, de injurias y, digamos que realmente parece ser que está de más.

Ahora, nos la pasamos copiando el estilo de vida norteamericano… ¿Por qué no copiarles lo bueno? ¿Por qué no tomar lo mejor de la Aldea Global conocida como Tierra? Y pensemos cómo está México, nos falta mucho para poder salir del hoyo en el que solos nos metimos por no tener valores, por sólo pedir y no esforzarnos, y menos agradecer, porque creemos que es obligación de todos, menos nuestra dar todo por lograr lo que queremos en la vida.

Es hora de no sólo ser buenos para pedir, ver qué nos falta, es hora de también saber agradecer: por lo que somos, lo que tenemos, de tener a personas con quien podemos compartimos nuestra vida, por nuestros hijos, nuestro trabajo, nuestros retos… hay tantas cosas que podemos agradecer, y no lo hacemos.

Como diría Violeta Parra en una de sus canciones: Gracias a la vida, que me ha dado tanto…


Feliz Día de Acción de Gracias

domingo, 20 de noviembre de 2011

¿Quieres ser madre soltera?


Hoy quiero compartir algo que, desde hace muchos años le doy vueltas y vueltas, y generalmente llego a la misma conclusión. Y es que no entiendo por qué, tan modernas somos las mujeres, que a fuerza tenemos que llenar un rol, que por los nuevos retos, no podemos llevar a cabo al 100%. Y sí, hablo de ser madre, principalmente soltera, y más, hablo de ser madre.

Y no es que sea una mala idea, no; tampoco es algo que te satanice, pero tampoco es algo que glorifique, la tarea de ser madre tiene una serie de bemoles que, hasta que te encuentras en la aventura, descubres. Simplemente tu vida pasa completamente a un segundo plano, para que tu(s) hijo(s) ocupe(n) el primer plano de todo.

En lo personal, ser madre es algo que no planee, mis diagnósticos eran: “no puedes ser madre”, y a pesar de que llevaba un cuidado, me confié, además estaba enamoradísima, en una relación —según yo estable— y cuando supe que estaba embarazada vivía con el papá de mi hijo, pero aún así, con los castillos en el aire, y con ese enamoramiento estúpido que tuve, ni vi con quien me involucré, ni el peligro de poner mi vida y la de otro ser en manos de alguien que no tienes idea de cómo responderá ante tal compromiso, y mucho menos que fuera a fallar de tal manera con un compromiso de una vida nueva.

Y al final de cuentas, como mujer, eres la responsable de los hijos. Te vuelves madre y padre, aunque tengas marido, la mujer es la que parió y es la que responde. Y es aquí cuando te enfrentas a la realidad, y si te fue bien, tendrás apoyo, si no, estarás sola.

Y si bien es preferible estar sola que padeciendo la irresponsabilidad de un hombre, la mayoría, sin mostrar el mínimo interés por sus hijos, es cuando reflexionas: “si su hijo, no lo mueve —y ahí la cosa esta muy pesada—, nadie ni nada lo hará”.

Así pues, en nuestros tiempos, mujeres en una afán de ser “muy mujeres” proclaman a los cuatro vientos que ellas pueden ser madres solas, y yo digo, sólo que sean hijas de millonario, y ni así es garantía de que no van a tener problemas, o de que puedan trasladar su responsabilidad a otra persona, háganlo a sabiendas de que pasarán muchos días y noches muy amargas.

¿Por qué?

Punto uno: vivir sola y ser responsable del sustento familiar en todos los aspectos, es una verdadera joda. Y si vivir con un hombre puede tener más desventajas, tener una sola toda la carga es realmente una pesadilla.

Punto dos: los buenos trabajos, con buenos salarios son muy raros. Y si te toca estar en uno, eres suertuda. La mayoría de trabajos pagan a la semana 1000 pesos y no te dan seguridad social. Y entonces te preguntas ¿quién te cuidará al hijo? Si tienes suerte te lo cuida tu familia, si no, expones a tus hijos a: abusos sexuales, físicos, verbales, bullying y un largo etcétera.

Punto tres: costo de la vida, costo de un hijo. Entre pañales, leche, talco, y más suplementos, hace 7 años, gastaba al mes con todo y guardería para mi hijo, más de 4,000 pesos al mes. Si tienen la suerte de contar con una buena familia, no pagarán renta, luz, agua, gas, que si no la tienen, pensamos en 7,000 pesos. Algo así. ¿Seguimos sumando? Comida, pasajes o carro, gas, composturas unos 4,000 pesos más. Y si les toca un enano como el mío, que le afecta lo que hizo su padre, entonces agregamos psicólogo, médicos. ¿Más nana, más, más, más? De verdad no creo que nadie, por voluntad, quiera ser tan bruta para querer pasar por eso sola.

Punto cuatro: quieren ser exitosísimas profesionalmente, entonces renuncien definitivamente a la maternidad. Los hijos no son un experimento. Y menos capricho para demostrar el lado opuesto del machismo, para convertirlo en hembrismo, y decir que pueden con todo. Bastante problema es controlar uno su vida como para llevarse a un angelito entre los pies.

¿Quieren ser madres, no se resisten a ese encanto de la vida?, pues sacrifiquen su vida profesional. Se sienten solas, cómprense un perro. Quieren que las cuiden cuando estén viejas, entonces paguen un asilo. Un hijo no es mascota ni geriatra. Ser madre soltera por voluntad es un error garrafal.

Ah, y tampoco es lindo pertenecer a un grupo cautivo para los bastardos políticos, que prometen despensitas pendejas y 2000 pesos por un voto.

Y lo peor de todo es que, realmente no disfrutas a tus hijos como debiste, no le diste la atención que necesitaba, y en ese inter, tu hijo puede volverse ingobernable, acostumbrado a que, para lavar las culpas de tanta ausencia, le das todo; ¿y qué pasa? que no valora nada, se acostumbran a tener todo, a chantajear y entonces, cuando no tienen del novio lo que quieren, usan violencia emocional, verbal y física; sí, por esa costumbre de darles todo, pueden llegar a matar, y entonces reaccionamos y nos preguntamos, ¿qué hicimos mal? ¿Cómo nos convertimos en responsables de la crianza de un hijo criminal!

Todas las que somos madres, no queremos que eso suceda, en lo personal mi hijo se volvió mi motorcito, mi fe; pero sí tengo miedo de equivocarme, descuidarlo y hacer algo muy mal, no poner atención a algo, y cambiaría mucho la historia, con tal de que mi hijo, tenga mayor estabilidad, y si bien hago todo lo posible por sacarlo adelante, y estoy en este embrollo tratando de resolverlo, por él, por un pequeño que no tiene culpa de nada, no comprendo que alguien quiera ser madre sola voluntariamente.